22 de julio de 2012

A 60 años del fallecimiento de Evita

“La Nueva Izquierda Independiente
y el universo simbólico peronista”

Charla-debate

 

Jueves 26 de julio, 18.30 horas


En la nueva casa del Frente Popular Darío Santillán
Santiago del Estero 866 (entre Estados Unidos e Independencia)


Con la participación de 
Vicente Zito Lema (poeta, dramaturgo, escritor),
Mariano Pacheco (periodista, escritor y militante
del Frente Popular Darío Santillán)
y Graciela Chopinet (militante del Frente Popular Darío Santillán, ex integrante del Peronismo de Base/Fuerzas Armadas Peronistas).

¡Están todxs invitados!


Por sus encendidos discursos (contra la oligarquía, contra los traidores, por la proclamación de la necesidad de que el peronismo sea revolucionario), así como por sus arengas a conquistar la victoria caiga quien caiga y cueste lo que cueste, su figura fue reivindicada como costado plebeyo y contestatario de un movimiento extremadamente heterogéneo. Por su actividad plena y su muerte prematura, con un cuerpo consumido por el cáncer, Evita fue revindicada como emblema de la militancia, como símbolo de quien se entrega a un proyecto aun a costa de su vida. “Viva el cáncer” fue la consiga que expresó hasta qué punto los “contreras”, los “gorilas” –como se decía de los antiperonistas – se exasperaban con esa mujer que decía que los grasitas, los cabecitas negras, los descamisados, tenían que ejercer el mando durante un siglo, para equilibrar la balanza del largo período en el que aquellos que vivían del trabajo ajeno se había beneficiado a costa de la explotación de los obreros. Por supuesto, por sus llamados a la lealtad fue idolatrada también por grises burócratas, por seguidistas que redujeron su figura a la de un fetiche, y fue cuestionada por su intolerancia hacia todo aquel que no fuera partidario del movimiento, como los obreros que no renunciaban a identificarse con las banderas rojas de la tradición sindical y política del movimiento comunista internacional. Asimismo, las feministas cuestionaron su incondicional subordinación a las políticas y  a la figura de Perón, y muchas mujeres vieron su posibilidad de votar por primera vez en el país y sus actividades sociales como una puerta de entrada a la política. Su cadáver embalsamado dio pie a una serie de leyendas, tanto peronistas como antiperonistas, que perduran hasta el día de hoy. La prohibición, por parte de la Revolución Libertadora (llamada por Rodolfo walsh como La Fusiladora), de mencionar su nombre (junto con el de Perón), y el secuestro y posterior desaparición de su cadáver la transformaron en emblema de la lucha por el retorno: de su cadáver, de Perón al gobierno, de la restitución de los derechos laborales y sociales conculcados por la dictadura. Así, de la resistencia peronista al surgimiento de organizaciones armadas, Evita fue bandera de una nueva generación de jóvenes  que la reivindicaron para sí, como expresión del compromiso político que, con los aires del continente y el mundo, pasaron a tomar como propia la bandera del socialismo. Hoy, seis décadas después de su muerte, la argentina contemporánea puede ver como su imagen es reactulizada, sobre todo, por las expresiones políticas y sociales que encuentran su lugar en la legitimación de políticas de Estado. Las expresiones que han nacido al calor de la resistencia antineoliberal, sobre todas las inscriptas en la denominada Nueva Izquierda Independiente, por lo general han encontrado su lugar bajo el sol en las iconografías paridas en las recientes luchas. La pregunta por la posibilidad de tomar a la figura de Evita también para sí es difícil de responder. Como sea, Evita sigue siendo un ícono central de la política y la cultura nacional. Y un aniversario como este puede ser motivo para despertar nuevos debates.


Al finalizar la charla habrá un brindis para festejar la inauguración
de la nueva casa del Frente Popular Darío Santillán en Capital.


Convoca
MOVIMIENTO DARÍO SANTILLÁN - FPDS Capital