El viernes 20 de junio la sede de ATE Capital, fue el lugar en que más de cien pibes y pibas se reunieron para organizar junto a La Revancha Secundarios, la comisión de acción social del Colegio Carlos Pellegrini y la Juventud Darío Santillán; el trabajo solidario en el que participaron jóvenes de distintas agrupaciones y organizaciones sociales y estudiantiles. Intercambiaron, cada uno desde su lugar, ideas, experiencias y expectativas y principalmente su voluntad de trabajar por un cambio social.
Las Jornadas, inspiradas en el ejemplo de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, fueron pensadas como un homenaje a todxs lxs jóvenes que le ponen el cuerpo a su sueño de una realidad distinta.
El domingo 22, muy temprano para muchos, y a pesar de la lluvia, los jóvenes fueron llegando cada uno a su punto de encuentro con el resto de los compañeros. El trabajo para hacer era mucho, pero la organización y el entusiasmo hicieron que no se sientan desalentados en ningún momento, a pesar del mal clima que parecía amenazar el trabajo en varios puntos.
Los barrios elegidos fueron Barracas y Pompeya. Todos con pecheras rojas, se identificaron con sus compañeros de brigada por el nombre en su pechera: Dario, Maxi, Luciano, Jere, Mono, Patóm. Cada brigada fue, no sólo un modo de homenaje a los pibes para traerlos a la memoria, sino también una manera de poner el cuerpo como ellos mismos lo habían hecho.
En Pompeya se pinto la escuela técnica n° 6 en la calle Echauri.
En Barracas, en la Villa 21 las cuadrillas trabajaron pintando un el jardín de infantes y en la escuela n°12 también arreglando bancos, mesas y sillas. En el jardín una radio abierta que recreó en una línea de tiempo la juventud militante, acompañó y musicalizó la jonada de laburo.
En la placita ubicada en Osvaldo Cruz y Zavaleta, arreglaron y pintaron los juegos, y limpiaron las zanjas de varias manzanas.
El compañerismo, el compromiso y sobre todo las ganas de hacer, se encarnaron en cada uno de los y las jóvenes que trabajaron codo a codo durante varias horas en cada una de las tareas. Muchos no dejaron de trabajar hasta en el momento del almuerzo, con una mano sostenían el sánguche de milanesa, y con la otra el rodillo cargado de pintura listo para la pared.
En el cierre de las jornadas se veían caras cansadas, pero no se escuchó ninguna queja, ni siquiera a los que les tocó la tarea menos agradable de la zanja. Todas fueron expresiones de alegría, de satisfacción, de sensación de tarea cumplida, pero no como el punto final: "listo, se acabó"; sino más bien como un comienzo, el inicio del trabajo conjunto en el que estos y estas jóvenes demostraron, y seguirán demostrando, que a falta de políticas públicas eficaces en los barrios, -muy al contrario de lo que piensan muchos y otros quieren hacer creer- ellos se involucran y no tienen miedo de salir a las calles y hacer.
Con alegría, orgullo y dignidad, la Juventud se mantiene de pie, multiplicando el ejemplo, continuando la lucha.
¡DARÍO SANTILLÁN, PRESENTE!
Fotos de las Jornadas, clik aquí.