La falta de obras públicas y de inversión por parte del gobierno macrista, y los distintos gobiernos municipales, provocó desastres en nuestros barrios de Merlo, San Martín, Quilmes, Avellaneda, La Matanza, Barracas y La Boca, como consecuencia de las lluvias acaecidas entre la madrugada y todo el día de hoy. Mientras el poder político pretende echarle la culpa al temporal, a la lluvia o a las causas climáticas, sabemos bien que las razones de las tragedias y las dificultades a las cuales son sometidas los sectores populares se hallan en la falta de decisión política respecto al avance en la urbanización de los barrios, la limpieza de arroyos y la falta de mantenimiento de infraestructura.
Lo cierto del asunto es que quienes más padecen estas cuestiones son los barrios bajos y las villas, donde viven y sobreviven los sectores más excluidos de la sociedad, quienes ven cómo irremediablemente se filtra agua dentro de sus casas, líquidos cloacales que desbordan los cordones, gente sin poder salir de sus viviendas por el estado intransitable de las calles, pero todos ellos y ellas con un sentimiento común de impotencia por tener que vivir en condiciones indignas debido a la falta de respuestas del Estado en todas sus representaciones: nacional, provincial y municipal. Urgen más respuestas y políticas efectivas por parte del gobierno y menos buscar responsabilidad en factores externos o naturales.
Nuevamente quedan al desnudo las carencias que padecen los olvidados, los marginados y excluidos, debido a la falta de atención e inversión del Estado, que descuida e ignora a los barrios más humildes. Seguimos luchando por una #VidaDigna y por #BarriosDignos
